Patatas: tipos de corte

Las patatas pueden ser el ingrediente principal de la comida o un acompañante ideal para otros platos, por ello, existen diferentes tipos de corte para este alimento.

Su versatilidad a la hora de cocinar lo hace uno de los alimentos predilectos de la cocina de todo el mundo. Además, es un alimento natural con una gran variedad de beneficios, por lo que es perfecto para recetas saludables.

Los cortes no son complicados, simplemente para poder aplicarlos hay que conocerlos. Hoy os presentamos los tipos de corte de las patatas más usuales:

Patatas paja: se cortan a lo largo muy finamente. Se fríen de una sola vez, porque debido a su grosor se hacen muy rápidamente.
Patatas cerilla: su grosor es un poco más grueso que el de las patatas pajas. También se fríen de una sola vez.
Patatas bastón: más gruesas que las patatas cerillas, podemos optar por freírlas de una sola vez o con doble fritura.
Patatas española: su corte es el tradicional de las patatas fritas, el grosor es mayor que en el caso de las patatas bastón.
Patatas puente nuevo: es una patata con un corte mucho más grueso que en la patata española. Se fríe con doble fritura.
Patatas chips: su corte es de forma redonda y muy fina. Se fríen de pocas en pocas para que no se peguen entre sí, con una temperatura de unos 180 grados.
Patatas rejilla: similares a las patatas chips, pero difieren en el corte. Necesitaremos una cuchilla estriada, llamada “mandolina”, que les dará forma de rejillas.
Patatas a lo pobre: patatas cortadas en rodajas similares de un grosor aprox. de 3 mm. Se fríen en una sartén con cebolla cortada en juliana. No se deben dorar en exceso, ya que el resultado consiste en conseguir unas patatas fritas pero jugosas.