Pan Frito, guarnición versátil

El pan frito es un acompañamiento versátil y delicioso que ha sido parte de la cocina tradicional en muchas culturas. Su simplicidad y sabor lo convierten en la guarnición perfecta para una variedad de platos principales, desde carnes, sopas, cremas, ensaladas, etc. Con su exterior crujiente y dorado, y su interior suave y esponjoso, el pan frito añade una textura única y un sabor delicioso. Sólo necesitamos pan duro y Aceite de Oliva Virgen Suave La Masía.

Cuando se sirve junto con carnes asadas o a la parrilla, el pan frito absorbe maravillosamente los jugos, elevando la experiencia de cada bocado. Además, su capacidad para acompañar sopas y cremas es insuperable, ya que se convierte en el suplemento ideal para disfrutar hasta la última gota de caldo o salsa. Esta receta es también una gran manera de aprovechar el pan del día anterior, dándole una nueva vida en la mesa.

Para hacer el pan frito, podemos optar por cortar el pan en pequeños cubos, o en rodajas enteras, ponemos en una sartén aceite Suave La Masía, en cantidad abundante. Cuando esté caliente, pero sin llegar a humear, introducimos el pan y los dejamos dorar por ambos lados, lo retiramos y colocamos sobre papel absorbente de cocina.

Os sugerimos el pan con sabores, que además de crujiente, está realmente sabroso. Es tan fácil como después de dorar el pan, mientras esté aún caliente, colocar las rodajas dentro de una bolsa donde antes habremos colocado un poco de orégano, sal y otras hierbas aromáticas a gusto, como puede ser perejil, pimienta molida, ajo molido,… también podemos utilizar queso rallado. Obtendrás unos exquisitos panes fritos con hierbas, perfectos para acompañar cualquiera de nuestros platos y disfrutar en comidas familiares o cenas especiales.