Dieta Mediterránea, gran aliada para prevenir el cáncer de mama
Como hemos comentado en otros artículos, el cáncer de mama es el más frecuente entre las mujeres occidentales. Cada año, según cifras de la AECC, se diagnostican 25.000 nuevos casos, una cifra que se podría reducir si seguimos un estilo de vida saludable.
Seguir unos hábitos saludables es algo que está en nuestra mano y que podemos llevar a cabo con un poco de esfuerzo. En muchos casos, basta con cambiar el chip: anteponer los platos a la plancha a los fritos, tomar más frutas y verduras, caminar en lugar de ir en coche, subir las escaleras en vez de utilizar el ascensor…
La Dieta Mediterránea es altamente beneficiosa para nuestra salud, tal y como avalan diversos estudios. En este punto, según las conclusiones del estudio EpiGEICAM, coordinado por la investigadora del Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III y dirigido por la Dra. Marina Pollán, este modelo de dieta ayuda a prevenir un 30% los cánceres de mama.
Esta conclusión se extrae después de analizar y monitorizar la alimentación de 1.017 personas en los servicios de oncología de 23 hospitales españoles. Los sujetos del estudio se dividieron en tres grupos, según la dieta a seguir:
- Dieta occidental. Se basa en un alto consumo de productos grasos, carne procesada, dulces, bebidas calóricas y bajo consumo de cereales.
- Dieta prudente. La componen productos bajos en grasa, frutas, verduras y zumos.
- Dieta Mediterránea. Quienes conforman este grupo consumen productos de lo más variados y equilibrados: pescados, verduras, legumbres, patatas, frutas, aceite de oliva y bajo consumo de zumos envasados y bebidas calóricas.
El objetivo de este estudio y de la monitorización de estos tres grupos de sujetos y dietas distintas es demostrar de qué manera la alimentación influye en nuestra salud y en el riesgo de desarrollar cáncer. Los resultados son optimistas y esperanzadores. La Dieta Mediterránea vence a la occidental y prudente, llegando a reducir las posibilidades de contraer esta enfermedad hasta en un 30%. Por el contrario, el peor modelo sería el occidental que, por otra parte, es el más frecuente entre las mujeres jóvenes.
Según ha descubierto el equipo de la Dra. Pollán, la Dieta Mediterránea es especialmente beneficiosa para los tumores triple-negativos, más agresivos y para los que de momento no existe un tratamiento de quimioterapia efectivo.
La alimentación es uno de los pilares fundamentales para presumir de salud. Por suerte, tenemos el privilegio de vivir en una región en la que la Dieta Mediterránea es muy fácil de seguir. Tenemos todos los recursos gastronómicos de nuestro lado, entre ellos nuestro preciado aceite de oliva, también beneficioso contra el cáncer gracias a su propiedad oleocanthal. Sólo tenemos que poner un poco de nuestra parte y apostar por alimentos y preparaciones saludables.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!